Entendiendo el presente: Tarot y memoria personal.
Entonces, en medio del templo, un hombre con capucha, una luz dorada y brillante, con hábitos de pies a cabeza, emergía a los ojos de Luz María Peña. Ella, sin nunca haberle visto antes, grabó cada detalle de lo que veía en su memoria.
- “Era un sueño iniciativo”, afirmó ella.
Nunca en su vida había visto esa figura, ni nada sabía del Tarot. Con los días, luego de esa visión, vio plasmado al mismo hombre en una carta: “era el hombre ermitaño, el de la sabiduría interior”, concluyó Luz María.
Desde allí iniciaría su tránsito, con pocas ideas pero con muchas inquietudes, por el curioso y cifrado mundo del tarot que “primero se tiene que entender desde adentro”.
A partir de allí, sumergió su práctica y la nombró tarot terapéutico pues, como ella lo dice, no se trata interpretar el futuro, sino, de entender el presente a partir del pasado. En ese juego de tiempos relaciona la memoria, pues cada uno, consciente de sus heridas y aprendizajes, toma una decisión responsable frente a su porvenir. Es la comprensión de una justicia con la propia existencia que coincide con la de otros.
“Es tener conciencia de sí mismo para generar una responsabilidad colectiva: tomar decisiones y modificar patrones”, sentencia la tarotista.
Frente a la práctica de tarot como tal, Luz María precisa que es un ejercicio en el que pesa mucho la subjetividad, pues, por ejemplo, solo la imagen de las cartas puede evocar en las personas situaciones por resolver, también puede desenterrar asuntos que se encuentran en el inconsciente y, finalmente, se convierte en hecho liberador porque “cada uno le da significado”.
En ese sentido, para ella, es importante el manejo de las expectativas con los consultantes porque se trata de entender el aquí y el ahora; además, entendiendo que hay mensajes que no son el tiempo de ver. El tarot para Luz María no pretende predecir, tampoco perder la libertad y la autonomía por lo que podría aparecer en este ejercicio que lo único que busca es que cada uno se responsable de su vida.